jueves, 22 de enero de 2015

SEMANA DE MOTIVACIÓN EN CLASE

Bueno... pues poco a poco el Circo va entrando en nuestra clase.

Para empezar, la mañana del Lunes en la colchoneta de la Asamblea nos encontramos con algo parecido a un circo... pero sólo veíamos tela de colores. Claro que, al acercarse uno de mis niños y tirar hacia arriba de ello, lo tuvieron claro: 

"Patri... esto es un circo para clase... pero tenemos que ponerlo bien porque así no vale."

"¿Y qué podemos hacer?"

"Podemos inflarlo por aquí" (Señalando uno de los enganches de color blanco que tiene en la base)

Así que lo intentaron sin resultado. Porque los pobres no hacían más que soplar y soplar hasta casi ponerse morados y aquello no cambiaba de forma.
Hasta que alguien dijo que esos agujeros eran para poner palos. 
Así que.... ¡¡A buscar palos!! Y tras encontrarlos en el Rincón de la Casita, así nos quedó el Circo.


Si... es el del IKEA. Ese que mi hija ha exprimido hasta más no poder en casa y que muy amablemente me dijo: 

"Vale mamá. Te lo llevas al cole de mayores un ratito y luego me lo traes a mi, ¿vale?"

Y ahí lo tenemos instalado en el rincón de la casita. Una de las normas que ellos muy bien han establecido es que hay que descalzarse para poder entrar en él y así lo hacen cada día.

El Martes nuestra Asamblea se llenó de globos de distintos tamaños.


              

Enseguida se lanzaron a por ellos sin pensarlo. Los tocaban, los lanzaban, hablaban de su tamaño...
Y se dieron cuenta que alguno de los globos contenía algo.
¿Cómo explotarlos? Con un lapicero y con una chincheta. Así lo hicieron.
Del globo morado grande salió una carta enrollada que uno de ellos se encargó de leer al resto de compañeros y a mí, claro.
En ella Fofito nos decía que el día que fuimos al Circo, su sobrino que está estudiando para ser payaso, se había colado con todas sus cosas en uno de nuestros autobuses. Con tan mala suerte de que al volver a circo olvidó los materiales y nos invitaba a buscarlos por nuestro Colegio.

De repente surgió una conversación en clase genial que quiero compartir con vosotros:

Julio: "A lo mejor todos los días del cole hay una cosa en la Asamblea"

Bruno: "Si es sábado y domingo no pueden pasar al cole asi que nos pueden traer dos cosas porque son dos días sin cole"

Sergio: "Cada día va a estar una cosa en la Asamblea. Pero lo que pasa es que si descubrimos una cosa antes, lo dejamos en la asamblea para que Fofito lo encuentre y se lo lleve a su sobrino"

Claudia M.: "Nos han traído los globos porque hemos cuidado muy bien el circo"

"¿Qué podemos hacer para ayudar al sobrino de Fofito?"

Darío: "Decirle que hemos encontrado el material"

Julio: "¿Y cómo? ¿Por teléfono?"

Darío: "Cuando tengamos todos los materiales se los llevamos al Circo"

Carlos: "Pero ya no hay Circo... lo han quitado"

En ese momento vienen los amigos de la otra clase para decirnos que en el patio hay que buscar los materiales y seguimos a lo nuestro.

Sergio: "Hay que mandar una carta a Fofito y hay que hacerlo por correo"

Varios: "Hace falta un sobre y un sello de payaso"

Pablo: "Tenemos que salir del cole para buscar un buzón para echarla"

Sergio: "Al lado de mi casa hay uno"

Darío: "También por correo electrónico"

En ese momento, tras muchos minutos pensando, llamamos al Señor del Circo (que resultó ser mi marido Sergio tras avisarle por Whatsapp que me siguiera la corriente), para que nos diera el correo electrónico de Fofito. Y así fue.... Lo teníamos: payasofofito@circo.es

Así que nos pusimos manos a la obra con la carta para Fofito. 
Primero, en la pizarra.


Y después, cada uno, escribieron la carta.









Si.... Todas metidas en el mismo sobre juntas directas a Fofito. 
¡¡Y con sello!! Todos diseñaron su propio sello y votamos por el ganador.
Ahora solo faltaba que Sergio, tal y como nos había dicho, echara la carta en el buzón de al lado de su casa. La carta ya está en camino...


Ahora sólo nos queda esperar... materiales... la respuesta de Fofito....

Si de algo me he dado cuenta con el paso de los días es que son una caja de sorpresas. 
Por mucho que yo tenga una idea de cómo quiero guiar el proyecto o por donde quiero tirar, eso es imposible. Son ellos los que verdaderamente hacen suyo el proyecto y dicen qué es lo que quieren.

Así que lo que toca es... !!!! ESCUCHARLES, ESCUCHARLES Y ESCUCHARLES !!!!

Y muchas veces se nos olvida hacerlo.



3 comentarios:

  1. Tenemos la mejor profe del mundo mundial Claudia M.

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    1. Y yo tengo unos alumnos y unas familias que son "chupi-chupi-guays"
      Gracias por leer y comentar.
      Besos

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    2. Y yo tengo unos alumnos y unas familias que son "chupi-chupi-guays"
      Gracias por leer y comentar.
      Besos

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